Cuadros decorativos para oficina
Los cuadros son particularmente la pieza más llamativa de un salón, ¿te podrías imaginar una pared de algún sitio sin ellos?, independientemente del propósito del espacio, ya sea una habitación, una sala o una oficina, las paredes se verían desnudas sin una imagen que las engalane, les dé una voz, un sentido; porque si, un cuadro habla, refleja, transmite y lo más importante representa el gusto de su dueño. Sin lugar a duda esta es una premisa en la cual debemos pensar cuando escogemos un cuadro para un lugar en el que vamos a pasar tanto tiempo como una oficina, quizá sea donde habitemos la mayor parte del día, así que, ¿por qué es tan importante la adquisición de un buen cuadro?, bueno, por la sencilla razón que será lo primero que veas al entrar a tu lugar de trabajo y por ende, lo que veas todo el día, además será el foco de atención de quienes entren al lugar, con eso claro, no es una tarea fácil la decisión, sin embargo si aciertas en ella, tendrás la satisfacción diariamente. Si se te dificulta elegir, aquí te tenemos unos consejos que seguro facilitarán esta tarea.
Lo esencial a la hora de adornar tu oficina es evaluar el estilo que tiene, seguramente no querrás un espacio vacío e insípido para inspirarte en tu trabajo, así que existen varias opciones, una de ellas es un estilo minimalista donde prime el detalle, o por otra parte que sea lo pintoresco apoderándose del lugar, en cualquiera de las dos opciones, tienes que evaluar la disposición de área con la que cuentas, lo primero es decidir el tamaño ideal para el cuadro, la armonía en el tamaño es una ficha clave en la decoración, no olvides la regla de la proporcionalidad.
Lo siguiente a definir es la temática del cuadro, si te enfocas en una obra de arte reconocida y antigua o una actual, en cualquier caso debes tener en cuenta dos aspectos importantes, el primero es la relación armónica entre los colores de las paredes y el cuadro, si la pared es colorida, busca un cuadro con tonos neutros, si por el contrario la pared es clara puedes jugar con los colores en el cuadro, el segundo aspecto es el marco, si el lienzo es de gran tamaño el marco puede ser grueso y con textura, ahora, si el lienzo es pequeño lo más recomendable es un marco delgado y liso, aunque como dato curioso, la tendencia hoy día es los cuadros sin marco, esto les da un toque moderno y de amplitud.
Para finalizar, no olvides que lo indispensable al elegir un cuadro para adornar tu oficina es la conexión que tengas con él, más allá de un estilo definido es el gusto particular por el lienzo, que cuando lo veas te inspire sentimientos positivos.